¿En qué consiste un seguro de vida?
Un seguro de vida riesgo es una póliza que protege económicamente a nuestros familiares en el caso de que algo nos suceda.
Principalmente cubre el fallecimiento del asegurado, aunque se pueden añadir otras garantías como son la enfermedad grave o la incapacidad permanente
¿Cómo funciona un seguro de vida?
El funcionamiento de un seguro de vida es muy sencillo. Este producto es un acuerdo entre una aseguradora y una persona, el tomador o asegurado. En este pacto, la aseguradora se compromete a pagar una cantidad de dinero (indemnización) a los beneficiarios (personas, normalmente familiares, elegidas por el tomador de la póliza) en el caso de que el asegurado fallezca.
El contrato del seguro de vida es anual y se va renovando anualmente de forma automática. En esta renovación, el precio suele subir un poco, ya que el precio del seguro depende de la edad del asegurado. La indemnización ayuda a los beneficiarios a cubrir todos sus gastos durante varios años. En el caso de que quedes incapacitado para seguir trabajando, un seguro de vida te permitirá tener una cantidad de dinero para seguir pagando todos tus gastos y los de tu familia.
¿Cuánto se cobra por un seguro de vida?
La indemnización que reciben los beneficiarios del seguro de vida, depende de la cantidad contratada por el asegurado. Este dinero, que se pacta en el contrato, es lo que se conoce como capital asegurado. Si hay un único beneficiario, este cobrará la indemnización completa. En el caso de haber varios, se repartirá equitativamente, a no ser que estén establecidos los porcentajes en el contrato.
Hasta qué edad te cubre un seguro de vida
Como bien indica su nombre, los seguros de vida temporales solo cubren un periodo de tiempo determinado. Lo normal es que cubran entre 10 y 30 años. Durante estos años, la póliza estará activa y tus familiares protegidos. Después de ese lapso, el tomador no tendrá que pagar más y la aseguradora no estará obligada al pago de la indemnización en caso de fallecimiento. La edad máxima para comprar un seguro de vida va a depender de la entidad con la que se contrate. Además, el tiempo será pactado entre el asegurado y la compañía a la hora de firmar el contrato. Generalmente, la edad máxima para el contrato de un seguro de vida está entre los 65 y 70 años. Por tanto, la cobertura puede extenderse más allá de los 65 años, en algunos casos llega incluso a los 80 años.
¿Cómo funcionan las aseguradoras?
Las aseguradoras de pólizas de vida son las encargadas de realizar el pago de la indemnización a los beneficiarios del seguro cuando el asegurado fallece. Por lo tanto, las aseguradoras son las que asumen el riesgo del fallecimiento del asegurado. Así, el seguro de vida permite que las personas que lo contraten estén tranquilas sabiendo que sus familias están protegidas si algo les ocurre. ¿Y cómo son capaces de pagar esas indemnizaciones? Las indemnizaciones en los seguros de vida riesgo solo se pagan si se produce el fallecimiento durante el tiempo que la póliza está activa. Como hay muchas personas que sobreviven a su póliza, a esas personas no se les paga nunca ningún dinero, pero ya han ido pagando sus primas. Por tanto, las aseguradoras reúnen el dinero de las primas de todos sus clientes asegurados y con ese dinero pagarán las indemnizaciones que correspondan.
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